Que los salarios en España acumulan cinco años de descenso continuado es una realidad incontestable que vamos a analizar a continuación de la forma más sencilla posible.

Cuando una persona percibe por la remuneración de su trabajo 1.200 euros brutos mensuales y no entramos a considerar la capacidad adquisitiva real que tal cantidad supone hablamos de una cuantía expresada en términos nominales.

No obstante, si lo que pretendemos es cuantificar el verdadero poder adquisitivo de una determinada percepción salarial, debemos conocer, también, la situación concreta del nivel de precios existente en la sociedad, pues solamente así seremos capaces de establecer el poder de compra real que dicha nómina permite afrontar. Estaremos hablando por lo tanto de una variable expresada en términos reales.

En el gráfico que mostramos de manera inicial hemos ofrecido los datos en términos reales. Es decir, hemos tenido en cuenta que si a un trabajador le prometen una subida salarial para el próximo año de un 3%, puede suceder que lo que en realidad le hayan prometido haya sido un descenso salarial del 2% (previendo un incremento general de los precios del 5%)

Por esta razón se puede afirmar que el salario medio de los trabajadores en España ha descendido ininterrumpidamente durante los últimos cinco años, a pesar de que tal y como se puede observar en el segundo de los gráficos, las remuneraciones salariales aumentaron en términos nominales en distintos momentos de los periodos 2003-2009 y 2010-2014 (en color rojo) y sin embargo ello no supuso un incremento efectivo en términos reales.

Salarios Nominales España

Pero cabe también matizar dos particularidades más en torno a los mínimos y excepcionales crecimientos de las percepciones salariales reales observados en el periodo 2010-2014.

En primer lugar, el extemporáneo aumento de los salarios registrado en el último trimestre de 2013 -tanto en términos reales como nominales- se originó como consecuencia del efecto escalón provocado por la supresión de la paga extraordinaria en diciembre de 2012 a los trabajadores del sector público. Es decir, constituyó un incremento interanual de carácter meramente estadístico.

Y también es preciso recordar que la reciente anotación de incrementos salariales en España en términos reales es una consecuencia externa a la propia evolución de las remuneraciones de los trabajadores, ya que se produce como resultado de una situación de deflación (tres trimestres sucesivos de descensos interanuales y continuados en los precios) que vamos a explicar a continuación.

Evolución IPC España

Según puede observarse en el último de los gráficos, la evolución trimestral del Índice de Precios al Consumo arroja datos negativos de forma sostenida desde el tercer trimestre de 2014 (en el primero de 2015 consignó un descenso del 1,02%).

De ahí que, aunque los salarios nominales de los trabajadores decreciesen en España a finales de 2014, un descenso paralelo y de una intensidad superior en los precios consiguiese originar, finalmente, un incremento de la capacidad adquisitiva real.

Pero este hecho no solo supone una circunstancia coyuntural y muy poco ortodoxa, también es un remedio macroeconómico contraproducente que en ningún caso constituye ningún tipo de solución. ¿De acuerdo?

Notas:

– Los datos de evolución de los salarios se han extraído de la Encuesta Trimestral de Coste Laboral publicada por el Instituto Nacional de Estadística.

– Se ha empleado el Índice de Precios al Consumo (IPC) para deflactar las cifras nominales realizando una media trimestral con los datos de carácter mensual.

– Los datos de salarios nominales están expresados en términos brutos. No se recogen por lo tanto las variaciones provocadas por los efectos fiscales (IRPF y cotizaciones a la Seguridad Social) derivadas de los aumentos impositivos aplicados a partir del año 2012.